Cuando un niño es muy pequeño, los padres tienen muchos temores sobre su estado de salud y preguntas sobre qué es exactamente lo que quiere y qué le molesta. ¿Cómo entender a un bebé sin palabras? Los expertos identifican 3 formas principales en que el niño “habla” con los adultos.

1. Llanto 

• El llanto es la manera principal y también más común que tienen los bebes para comunicarse con los adultos. En los primeros 4 meses después del nacimiento del bebé, el llanto es su forma principal de expresar sus necesidades. ¿Cómo distinguir cada tipo de llanto?. 
• Llanto invocador. El niño pudo estar solo por mucho tiempo, quiere que lo alcen en brazos. Seguramente grita por 5 a 6 segundos, luego se detiene por unos 20 segundos, como si esperara un resultado. Si no ve resultados, lo repetirá una y otra vez. 
• Llanto hambriento. Puede comenzar con un llanto invocador, si el bebé fue alzado pero no fue alimentado, el llanto no va a parar, se volverá histérico, el niño girará la cabeza y pueda que haga sonidos de succión.

.Llanto de dolor. Esta clase de llanto será monótono, fuerte e incesante.

1. Por los sonidos

La pediatra australiana Priscilla Dunstan ha investigado los sonidos de la primera infancia (hasta 3 o 4 meses) durante más de 20 años. Miles de bebés de diferentes partes del mundo participaron en sus experimentos. Priscilla cree firmemente que los sonidos y reflejos primarios son internacionales.

Aunque luego de los 4 meses, el niño hace sonidos porque quiere comunicarse y tiene menos que ver con las necesidades físicas de sus primeros 3 meses. Priscilla abrió una escuela donde enseña a los padres primerizos a entender a sus bebés. Se cree que al reconocer estos sonidos a tiempo, se puede evitar el llanto. Aquí podemos ver algunos sonidos principales:

• “Ña” (“ñe”): “¡Tengo hambre!”. Este sonido se surge cuando el niño presiona la lengua contra el paladar y se genera por el reflejo de succión.
• “Au” (“ou”): “¡Quiero dormir, estoy cansado!”. Al poner los labios en “o”, ante el primer signo de un bostezo, el bebé hace este “sonido de cansancio”.
• “Je”: “¡Me siento incómodo!”. Las sensaciones táctiles desagradables hacen que el niño se mueva, agitando los brazos y las piernas. Y cuando, al mismo tiempo, se abre la boca, se producen sonidos como estos.

1. Por los movimientos

El lenguaje corporal nos dice mucho sobre aquello que quiere nuestro bebé, por ejemplo:

• Gira la cabeza rítmicamente. Un movimiento para conseguir  tranquilizarse. El bebé puede hacer eso a la hora de acostarse o al estar en compañía de personas que son desconocidas para él.
• Aprieta los puños. Signo de hambre. Al verlo a tiempo, se puede evitar el llanto hambriento.

Como hemos visto, hay señales para entender lo que los pequeños de las casa quieren aunque no se puedan expresar con palabras.